Al finalizar el primer trimestre escolar, los grupos de GL entraron en la etapa de empatía del proceso de Design Thinking. Allí, comenzaron a identificar algo que faltaba, algo que se podía mejorar o algo que deseaban que su comunidad tuviera para mejorar la vida de los demás. Para ello, los estudiantes propusieron una idea innovadora que impactara directa y positivamente a una comunidad, utilizando uno de los ODS como guía para su diseño. Trabajando en colaboración con los miembros de su grupo, los equipos presentaron sus ideas a los "Tiburones", miembros de la comunidad de todo el campus, quienes a su vez les brindaron retroalimentación significativa para ajustar los objetivos de su proyecto y tomar medidas durante el resto del año.

Hemos visto un gran progreso en el desarrollo de proyectos desde aquellas presentaciones iniciales en octubre. Si bien algunos conceptos de proyecto han perdurado, como un grupo de mentoría estudiantil llamado "Big Sib" o un grupo de protección solar para arrecifes llamado "Asé Sunscreen", otros estudiantes se dieron cuenta de que sus ideas originales no se alineaban del todo con sus pasiones e intereses. El primer semestre escolar concluyó con una Feria de Liderazgo Global, donde se animó a los estudiantes a reflexionar sobre sus intereses y por qué. A través de esta experiencia, los equipos pudieron "elegir su propia aventura", donde los estudiantes pudieron (1) compartir su progreso con sus ideas originales, (2) reclutar nuevos miembros para el equipo para cubrir los roles identificados, o (3) promover sus habilidades individuales a otros para que se unieran a un equipo completamente nuevo. Gracias a esta experiencia, los estudiantes tuvieron que articular claramente sus habilidades, intereses y motivaciones en un entorno comunitario. La reflexión iterativa de los estudiantes ha sido una parte importante del proceso de Design Thinking y contribuye en gran medida al éxito que estamos viendo en nuestros grupos de GL al final del año.